Si esta iniciativa no soluciona
el problema de alojamiento de estas personas, por lo menos les proporciona
un refugio y un espacio de intimidad.
Pero esta campaña
tenía otra ambición: darle cierta visibilidad al problema.
Si uno ya no nota el vagabundo yaciendo en un rincón, no se puede
perder la tienda instalada en medio de la acera.
Desgraciadamente, una cosa
es medir la amplitud de un problema otra es solucionarlo.